Nuestra vida moderna nos ha otorgado muchas comodidades, pero nos ha desconectado de la Naturaleza.
Cd repaso los hábitos de vida de nuestros pacientes, la mayoría están muy alejados de la Naturaleza. Pocos son los afortunados que disfrutan de un jardín o zonas verdes en su entorno, y las aprovechen en su día a día. Los médicos siempre hemos tenido precaución con los pacientes “institucionalizados” por su mayor riesgo de hipovitaminosis D y otros problemas metabólicos y emocionales. Pero hoy en día el ritmo casa-coche-oficina-gimnasio, hace que cada vez haya más personas “institucionalizadas”.
Por ello recomiendo buscar momentos para pasear por el campo o incluso un parque, respirar aire limpio (recordemos que en el interior de nuestras casas puede haber hasta x10 veces más contaminación que en las calles), descargando la cantidad de electricidad electrostática que acumulamos en nuestro día a día con el simple gesto de caminar descalzos (”grounding o earthing”), relajando nuestra mirada mirando al horizonte (tan acostumbrados en nuestro día a día a distancias menores de 2 m lo que sabemos que afecta tanto a nuestra vista), dejando nuestros móviles y redes sociales para pasar un rato con nosotros mismos en silencio, cosa que hemos olvidado hacer, relajando nuestro cuerpo y nuestra mente, exponiéndonos a la luz del sol sin gafas.
ni gorras para sincronizar nuestros ritmos circadianos, observando los ciclos de la naturaleza, y escuchando lo que la vida y nuestro alma anhela decirnos pero acallamos con nuestro ruido mental diario.
Como les digo a mis pacientes, “la respuesta siempre está en la Naturaleza, sólo hay que observarla con atención y sabiduría”.
Aquí te dejo otras razones por las que buscar ratitos de conexión con la naturaleza son importantes para tu salud!
- Reducción del Estrés: La exposición a entornos naturales ha demostrado reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés, contribuyendo a una sensación de calma y relajación.
- Mejora del Estado de Ánimo: Pasar tiempo al aire libre y en la naturaleza se asocia con una mejora del estado de ánimo y la reducción de síntomas de depresión y ansiedad.
- Aumento de la Creatividad: Estar en la naturaleza puede estimular la creatividad y la resolución de problemas, proporcionando un entorno propicio para la reflexión y la inspiración.
- Mejora del Sueño: La exposición regular a la luz natural durante el día y la oscuridad durante la noche, alineada con los ritmos circadianos naturales, puede mejorar la calidad del sueño.
- Refuerzo del Sistema Inmunológico: Numerosos estudios sugieren que la exposición a la naturaleza fortalece el sistema inmunológico, ayudando al cuerpo a combatir enfermedades.
- Aumento de la Energía: Estar al aire libre y en entornos naturales se ha asociado con un aumento de la energía y la vitalidad, contrarrestando la fatiga y el agotamiento.
- Reducción de la Presión Arterial: La interacción con la naturaleza ha demostrado reducir la presión arterial, lo que contribuye a la salud cardiovascular.
- Mejora de la Concentración: La exposición a la naturaleza puede ayudar a restaurar la atención y la concentración, especialmente en entornos urbanos donde la atención constante puede agotar.
- Fomento del Ejercicio: Los entornos naturales a menudo ofrecen oportunidades para la actividad física, lo que contribuye a la salud cardiovascular y general.
- Grounding: Al caminar descalzo sobre la tierra (grounding) conectamos directamente con la energía de la tierra, descargamos nuestra carga electrostática, y reducimos la inflamación y el estrés.