Sobre mí

20 Años de Experiencia

Llevo ejerciendo como médico más de 20 años, en los cuales no he parado de estudiar, de seguir aprendiendo y de formarme en todas las disciplinas necesarias, convencionales y no convencionales, para mejorar la salud de mis pacientes de una forma global e integradora.

La especialización como médico de familia ha sido una de las mejores formaciones que he podido adquirir dentro de la medicina académica clásica, aprendiendo de numerosas patologías, de sus tratamientos farmacológicos más actualizados, contemplando al individuo en su entorno social y familiar, y con la idea utópica de que podíamos llegar a impactar en él y su familia no sólo para disminuir las patologías que sufrían sino las que podían evitarse con un correcto abordaje preventivo.  Nada más lejos de la realidad que la que vivimos hoy en día en un sistema de 6 minutos por paciente, que no cuida a sus médicos con coontratos dignos y estables, ni promociona que las familias tengan a su médico de referencia toda la vida.

Por todo ello, y por la inquietud que me supuso el saber mucho de enfermedades y cómo cronificarlas, pero nada de cómo ayudar a sanar profundamente a mis pacientes para evitar perpetuarles con sus tratamientos farmacológicos, comencé mi camino hacia un nuevo mundo de conocimiento dentro de las terapias complementarias, medicinas tradicionales (medicina ayurvédica, homeopatía, terapia neural, auriculoterapia, acupuntura, ozonoterapia, medicina ortomolecular, etc) la nutrición como base de la salud, los suplementos naturales y herbáceos como opciones terapéuticas tan válidas y menos agresivas con nuestro organismo, el apasionante mundo de la microbiota intestinal o de la interferencia de los tóxicos y contaminantes ambientales en nuestra biología.

Por ello, mi abordaje dentro de la Medicina Integrativa y Funcional, hace que mi abordaje sea mucho más rico, más respetuoso, más holístico y más profundo, intentado hacer diagnósticos etiológicos y no sólo sintomáticos, buscando lo que hay detrás de sus «etiquetas diagnósticas», empoperando al paciente y ofreciendo otras herramientas asociadas a sus tratamientos clásicos que les puedan ayudar a encontrar sentido a sus patologías y una salida más allá de la cronificación eterna.

Gracias a ello, mis consultas se han convertido en espacios de disfrute y de gran satisfacción, tanto para mis pacientes, como para mí.